
Así lo dijo durante el programa José Vicente Hoy, transmitido por Televen.
José Vicente Rangel preguntó: "¿Qué pasa con el diálogo? Porque el diálogo es una aspiración del país".
"Más del 80 % de los venezolanos está de acuerdo con que exista un diálogo entre el Gobierno y la oposición. Sobre todo la gente piensa que la conciliación de ambos bandos puede contribuir a resolver los problemas económicos, que es la principal preocupación de ocho de cada 10 venezolanos", explicó Schémel.
Asimismo, comentó que "la palabra conciliación es la nueva palabra que aparece en los repertorios lingüísticos de la población, según nuestros estudios cualitativos".
"Han decidido salir de Maduro por las malas"
Por otro lado, Rangel preguntó: "¿Qué pasa que no se materializa ese diálogo, que es pateado prácticamente por un sector del país?".
"Creo que la decisión está tomada, yo creo que los factores externos han decidido salir de Maduro por las malas. Desde 2002 han intentado salir del chavismo por las malas", insistió Schémel.
Según indicó, "en las estrategias en las que más han insistido es en las estrategias insurreccionales a través de la caotización, las protestas, la tentativa de explosión social, la búsqueda de una ruptura institucional, de una división dentro de la Fuerza Armada. La decisión tanto ahora como antes está tomada, salir de Maduro, o de Chávez en aquel momento, por las malas".
"Obviamente, si no hay diálogo hay golpe", apuntó Rangel.
"Si se cierra la puerta del diálogo, se abre la ventana de la confrontación y del derrocamiento", aseveró Schemel.
Las "debilidades" de la oposición
De igual forma, enfatizó que "los factores externos, los factores dominantes están apostando a la aniquilación, a la amputación, a la salida de raíz del chavismo. En su estrategia no se están planteando la cohabitación, la convivencia, la conciliación ni la alternancia. Están apostando por un derrocamiento, definitivamente".
"En este momento la estrategia está concentrada en el cerco económico, en la asfixia financiera, en la caotización del país, en la posibilidad de una explosión social derivada de la aguda crisis social ocasionada por la inflación, desabastecimiento o por una ruptura institucional muy asociada a la Fuerza Armada", manifestó Schemel.
En su opinión, "el conflicto venezolano ya se internacionalizó. Siempre ha tenido un componente o ha estado ubicado en el tablero internacional. Ahora es mucho más visible, mucho más claro (…). La confrontación finalmente es contra los Estados Unidos".
Por otra parte, Rangel preguntó: "¿Qué predices tú? Posiblemente todavía hay tiempo para un nuevo intento de diálogo".
"Siempre hay que dejar esa puerta abierta", afirmó Schémel.
"Pero al cerrar esa puerta, ¿qué va a hacer la oposición? Porque si no hay diálogo, ¿qué hay? Violencia", apuntó Rangel.
"La decisión definitiva de tomar la vía insurreccional, el atajo, creo que también viene dada por las profundas debilidades de la oposición venezolana que nunca terminó de convertirse en una alternativa, en disputarle al chavismo el respaldo de las mayorías, en cambiar la correlación de fuerzas, no solamente electoral, sino la correlación de fuerzas más importante que es la correlación de fuerzas social, política, cultural y simbólica", explicó.
En su opinión, "tienes un actor local que no está a la altura de las circunstancias, que no tiene competencias, capacidades, comprensión sobre lo que hay que hacer para disputarle el poder al chavismo. Esa debilidad ha obligado a los factores externos a decidirse por la vía insurreccional, pero creo que esa estrategia subestima algunos factores de orden político, cultural, subjetivo".
"Hay elementos ideológicos decisivos"
Por otro lado, Schemel comentó que "la disputa en Venezuela es una disputa política, ideológica. Después del fracaso del neoliberalismo, la ideologización de la política (…) se hizo muy visible y muy profunda en Venezuela. En Venezuela hay debate ideológico, no solamente es un debate acerca de la gestión del Presidente, es un debate también acerca de una visión de país, de una concepción de la sociedad".
Rangel preguntó: "¿Eso favorece al Presidente?".
"Eso favorece al chavismo, porque más allá de la gestión, hay elementos ideológicos que son decisivos. Además, el chavismo ha sido siempre muy acertado en sus estrategias de desempeño social y de desempeño comunicacional", expresó.
Consideró que "la oposición permanentemente ha despreciado el rol que tienen los mensajes, los símbolos, las propuestas y por eso es muy débil. Se beneficia y ha salido beneficiada en algunas oportunidades por las debilidades del oficialismo, por el desempeño económico sobre todo, el desacertado desempeño económico del oficialismo, pero la oposición nunca ha terminado de convertirse en una alternativa que convoque, que entusiasme, que movilice amplias mayorías del país".