Aguinaldos

Opinión | diciembre 21, 2021 | 6:20 am.

Hasta hace pocos años simulaban un aguinaldo. El entusiasmo navideño comenzaba desde su cancelación  novembrina en el sector público.

Es muy poco lo que se da ahora. Si es que se da.

La tendencia en algunos centros urbanos es ahorrar para un dakazo. Todos sabemos que esconde el neologismo.

A los empleados del Estado igualmente los agarra la hiperinflación con unas bolsas de comida más o unas bolsas de comida menos.  Claro que estos regalos de mérito partidista en nada se relacionan con el pobre salario percibido.

Atrás quedó aquel bullicio que armaron sobre las prestaciones sociales por año. Dirán que no hay mejor aguinaldo que permitir la supervivencia en medio del gigantesco y deliberado marasmo que nos ha tragado.