Exclusiva ND | Toro Hardy: Están sacrificando la producción de gasolina para atender la crisis de gasoil

Economía | mayo 10, 2021 | 12:37 pm | .

Nuevamente se observan largas colas para el abastecimiento de gasolina en las diferentes estaciones de servicio del país, situación que había disminuido en algunas regiones, entre ellas, Caracas.

Ante esta situación, el economista y experto en materia petrolera, José Toro Hardy, indicó a ND que todo esto tiene un problema de origen técnico. Explicó que el petróleo al momento de refinarlo pasa por diferentes niveles de procesos físico-químicos. «De la primera fase se obtienen aceites y fibras vegetales, en la segunda, tercera y cuarta etapa se obtienen otros productos, mientras que en la quinta se produce gasoil y en la sexta, gasolina», dijo.

Toro Hardy aseguró que las refinerías venezolanas están trabajando de manera espasmódica, sobre todo la de Cardón pero, «cada vez que tratan de aumentar el volumen de producción se presentan problemas de vibraciones, fugas de petróleo o conatos de incendio y entonces tienen que pararlas», expresó.

«Cantidad limitada»

El experto petróleo afirmó que lo que está alcanzando actualmente en producción de combustible es una «cantidad limitada» ante una «enorme demanda de gasoil porque empieza la etapa de siembre y los tractores necesitan gasoil para poder operar». A ello, agregó que dicho combustible también es necesario para el traslado de los alimentos desde los centros de producción hacia los centros de consumo.

 

Sacrifican la gasolina

A juicio de Toro Hardy, aseguró se está sacrificando la producción de gasolina para poder atender la crisis de gasoil y la etapa de siembra y «es por eso que empezamos a ver colas en las estaciones de servicio. El mismo petróleo que se va refinando en su quinta etapa produce gasoil y en la sexta, gasolina; están sacrificando la sexta etapa para producir gasoil y así satisfacer la demanda del sector agrícola. Por eso no hay gasolina», puntualizó.

 

A finales de mayo del año 2020, Nicolás Maduro anunció que a partir del 1ero de junio comenzaría la distribución de gasolina iraní y entraría en vigencia un nuevo esquema de precios de los combustibles: gasolina subsidiada en 5.000 bolívares el litro con un cupo mensual de 120 litros por carro y 60 litros para las motos. A ello, se le sumaron unas 200 estaciones de servicio con venta de combustible a precio «internacional» cuyo costo por litro sería de 0,50 dólares pagaderos en divisas, petros o a la tasa de cambio al día.

Esta situación alivió algunas regiones, entre esas, Caracas, Miranda, Carabobo y Aragua. Sin embargo, el escenario siguió siendo el mismo en otras entidades del país donde la escasez de gasolina data desde hace varios años y se intensificó desde la llegada de la pandemia por el coronavirus.

«El problema comenzó hace muchísimos años. En el 2004 despidieron a 20 mil trabajadores de Pdvsa que tenían en promedio unos 15 años trabajando para la industria, de manera que fueron unos 300 mil años de experiencia de conocimiento que lanzaron al cesto de la basura. De ahí en adelante, Pdvsa nunca más dio pie con bola. De aquellos equipos buenos siguieron funcionando algunos años más y luego de no tener el personal suficientemente capacitado, progresivamente se fueron degradando», sostuvo el experto en petróleo.

Refinerías incapaces de producir

A su juicio, Toro Hardy señaló que las refinerías venezolanas están en degradación total y subrayó que cuando el fallecido presidente Hugo Chávez llegó al poder, el país era propietaria «total o parcialmente de 22 refinerías en el mundo. Hoy en día la inmensa mayoría de esa red la ha perdido pero en particular, las refinerías de Venezuela. Estas ya no son capaces de operar, están destruidas. Se debe hacer una inmensa inversión en ella y recuperar el personal con conocimiento para que nuestra industria petrolera vuelva a funcionar», puntualizó.

Para finalizar, el economista reiteró la necesidad de que se implanten mecanismos que sean capaces de absorber la inversión privada requerida que, a su vez, permita llenar el vacío que hay actualmente. «A la industria le hace falta inversiones. El Estado es el propietario pero no tiene las condiciones porque está quebrado», expresó.