Se perdió la calle, y otra batalla

Opinión | enero 18, 2020 | 6:18 am.

Los esfuerzos que hoy en día se hacen en Venezuela por parte de la oposición venezolana para buscar el apoyo de la gente se ha esfumado.


La gente no cree en nadie. La política venezolana opositora va de fracaso en fracaso debido a un cúmulo de errores que han llevado a que este pueblo aguerrido que se había levantado nuevamente en el 2019 se haya enconchado decepcionado de no ver resultados.

Hoy se convoca a acompañar a los diputados de la Asamblea Nacional y no aparece nadie. Únicamente están las mismas personas que pertenecen a los partidos políticos que forman parte de la alianza opositora.

Se perdió el ánimo. Se perdió la esperanza, y tocará levantar de nuevo a toda esa población. quizás ya hoy en lo que anda pendiente es en buscar la arepa para llevar algo de sustento a sus hogares.

La brújula está perdida. La dirigencia opositora tambien la perdió. El no presentar resultados ha provocado ese rechazo a cualquier tipo de convocatoria, ya sea a defender a los diputados que ya han perdido hasta la sede para poder sesionar.

Hoy deambulan por Caracas para poder llevar a cabo las sesiones. ¿Hasta dónde llegará esto? Considero que está llegando la hora de un vuelco en la línea dirigencial del país, y con mucho respeto les dijo: no han cumplido con lo prometido y a saber ya son 20 años de enfrentamiento, y los últimos 4 años de la AN aún teniendo una mayoría absoluta, no han logrado nada positivo para el país. se ha perdido una oportunidad de oro.

Hoy vemos como el alto costo de la vida y la desmejora considerable de los servicios públicos van in crescendo, pero de ese tema nadie se ocupa y ni dicen nada para poder defender a la gente y presionar al régimen para que mejore en algo esta situación tan critica que agobia al pueblo venezolano.

Si nosotros los opositores hemos perdido la calle, del otro lado del régimen tampoco escampa. Convocan marchas para la paz, y los únicos que concurren son unos cuantos vividores, junto con los colectivos violentos que los usan para ir en contra del sector opositor como ha ocurrido en más de una oportunidad.

Marchas de un lado y de otro ya no son multitudinarias. Ya no animan a la gente y eso demuestra ya que ninguno de los dos sectores gozan de credibilidad en la población. Todo lo que ocurre en el país en gran parte es culpabilidad del régimen inescrupuloso y mafioso. Pero otra parte es culpabilidad de los errores cometidos por la oposición aunados algunos que cohabitan con el régimen.

Se hace necesario la revisión de la estrategia. La aparición de nuevos liderazgos, ya que muchos de los que hoy hacen política son bueyes que lucen cansados, y ya la gente no les cree el discurso, y la gente lo dice y expresa ese malestar en los mercados o cualquier sitio público.

Caótica la situación. Se hace menester direccionar la política hacia la gente. Hacia los desposeídos, para que podamos tener una opción verdadera de cambio, ya que pareciera que a muchos no les interesa el cambio, y les gustaría seguir en el juego de cambiar para no cambiar nada. Pareciera gustarle a muchos ese estado de cosas de las cuales mucho provecho sacan, y por supuesto se sienten cómodos.

En fin. Por ahora no hay calle y recuperarla costará Dios y su ayuda. Las equivocaciones los errores se pagan duro. Pero la recuperación de la confianza de la gente se hace menester retomarla. Para ello se debe buscar la reunificación de todas las fuerzas opositoras con un mensaje claro, coherente, trazar la estrategia para poder luchar contra la dictadura. Reagrupar las verdaderas fuerzas del cambio es el camino, con seriedad y sin ambigüedades.

No todo está perdido. Solo una batalla más. Así es la guerra.

Abogado